- 19-02-2013
- General
¿Cómo evitar las humedades por filtración de agua?
Las humedades por filtración de agua, a menudo denominadas “daños por agua”, pueden causar graves problemas estructurales y de salud si no se detectan y tratan.
Las fugas de agua pueden afectar a la calidad del aire del espacio por donde se filtra, creando un ambiente lleno de bacterias y moho, lo que provoca trastornos respiratorios, alergias cutáneas y otras enfermedades.
La presencia de humedad en un edificio también puede provocar daños estructurales importantes, como tablas del suelo o puertas podridas y muebles dañados.
Es importante ser consciente de cualquier filtración existente y conocer las mejores formas de evitar que se produzcan más daños. En esta guía hablaremos de cómo identificar, evaluar y detener las fugas de humedad en tu casa.
¿Cuáles son las causas de las filtraciones de agua por humedad?
Las fugas de humedad pueden producirse por varios motivos, como una fontanería defectuosa, tejados dañados, desagües obstruidos, tejas y canalones que faltan, e incluso ventanas y puertas mal selladas.
Además, la pintura, el yeso o el papel pintado mal aplicados también pueden ser fuente de fugas de humedad.
En resumen, si hay algún hueco o grieta en la estructura del edificio de tu casa, es probable que deje entrar humedad, lo que puede causar daños a largo plazo en el edificio.
¿Cómo identificar las fugas de humedad?
Si sospechas que hay una fuga de humedad en el edificio, el primer paso es identificar de dónde procede. Si la filtración es grande o recurrente, lo más probable es que el origen sea el tejado, un problema de fontanería o un problema estructural con las puertas y ventanas.
Si observas que la fuga procede de una zona grande, como el tejado, se puede utilizar una cámara de inspección por infrarrojos para localizar el origen exacto de la fuga. Este dispositivo permite buscar puntos calientes y fríos, que pueden indicar zonas donde hay humedad.
Si el origen del agua procede de una fuente más pequeña, como un electrodoméstico, un grifo con fugas o una grieta en la pared, puedes utilizar un medidor de humedad. Estos aparatos miden el contenido de humedad en materiales porosos como paneles de yeso, madera y mampostería.
Si una superficie presenta lecturas de humedad elevadas, se deben tomar medidas para detener la fuga inmediatamente. También se puede utilizar un deshumidificador para reducir la humedad del aire y reparar los daños ya causados.
¿Cómo detener las humedades por filtración de agua?
Una vez que se haya identificado el origen de la fuga, es hora de tomar medidas para impedir que vuelva a aparecer. Dependiendo de la ubicación y el tamaño de la fuga, hay algunos métodos diferentes que se pueden utilizar para evitar daños futuros:
1. Reparación del tejado
Si el tejado es el origen de la fuga, es esencial que se tomen las medidas necesarias para reparar el problema. Los tejados dañados pueden deberse a una mala instalación, a la falta de tejas o canalones, o simplemente a la edad y el desgaste. El mantenimiento regular del tejado es clave para mantenerlo en buen estado, y cualquier reparación debe realizarse lo antes posible para evitar que se produzcan más daños.
2. Reparaciones estructurales
Si las puertas y ventanas son el origen de la fuga de humedad, hay que comprobar que estén bien selladas. Si hay juntas o grietas visibles, se debe utilizar un sellador, como silicona o masilla acrílica, para evitar que entre humedad en el edificio.
También es importante comprobar si hay signos de humedad en las paredes interiores. Si el yeso está dañado o la pintura se desconcha, es probable que haya humedad. En este caso, hay que retirar cualquier material blando, como el yeso, antes de utilizar una solución antihongos para evitar que la humedad reaparezca.
3. Reparaciones de fontanería
Si la fontanería es el origen de la fuga de humedad, hay que tomar las medidas necesarias para reparar las válvulas rotas, las tuberías con fugas o los desagües obstruidos. Si no se puede identificar o solucionar el problema por uno mismo, es aconsejable ponerse en contacto con un fontanero profesional que pueda evaluar y reparar los daños de forma eficaz.
4. Utilización de pintura/barniz impermeable
Aplicar un sellador o pintura/barniz impermeable puede ayudar a proteger las paredes y techos de los daños causados por la humedad. Estos selladores están diseñados para ser permeables al vapor y ayudarán a mantener la calidad del aire en el edificio, al tiempo que evitan que se formen nuevas filtraciones.
5. Utilizar soluciones hidrófobas
Una solución hidrófoba es una forma eficaz de evitar que se formen fugas de humedad. Este tipo de solución impide la absorción de agua y proporciona una barrera a la superficie, evitando las filtraciones y la absorción superficial. Las soluciones hidrófobas son fáciles de aplicar y proporcionan protección a largo plazo.
Conclusión
Las fugas de humedad pueden causar graves daños a largo plazo en un edificio, creando un ambiente insalubre y pudiendo provocar problemas estructurales importantes. Para evitar que se produzcan fugas de humedad, es importante identificar y reparar las fugas existentes lo antes posible, así como tomar medidas para proteger la edificación de futuros daños.
Reparar tejados y paredes, utilizar selladores impermeables, pintar/barnizar las superficies, y emplear soluciones hidrófobas son formas eficaces de evitar fugas de humedad en un edificio.
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